sábado, 5 de mayo de 2012

Los Arrecifes de Coral



Según la ONU, el 60% de los corales del planeta habrán desaparecido en el año 2030.
Los arrecifes de coral son estructuras calcáreas formadas por pequeños pólipos de pocos milímetros y que tienen capacidad para fijar el calcio del mar y que tras la muerte del animal siguen formando esas estructuras que a su vez siguen colonizando otros pólipos dando lugar a los arrecifes cuyo proceso lleva desarrollándose durante miles y miles de años.
En Barcelona, recientemente, un equipo de investigadores descubrieron unos fósiles de corales de 400 millones de años, únicos en el mundo y que son capaces de trasladarse para colonizar otras zonas, evitar depredadores e incluso desenterrarse de los sedimentos.
Estos ecosistemas son esenciales en la cadena alimentaria de los océanos proporcionando sustento a 100 millones de personas. Desafortunadamente los corales ya se encuentran en la Lista Roja de Especies Amenazadas según la Unión Mundial para la Naturaleza.
El estado en el que se encuentran los Arrecifes de Coral de todo el mundo es lamentable debido al estrés medioambiental: El aumento de la temperatura de los océanos, responsable del “blanqueo del coral”, provoca que expulse a la zooxantela, un tipo de alga simbiótica responsable de producir nutrientes a través de la fotosíntesis y que da al coral su color característico, pudiendo llegar a provocar su muerte y las emisiones de CO2, causantes de la formación de bicarbonato e iones de hidrógeno reduciendo el pH del océano alterando su acidez, fenómeno que afecta al desarrollo del carbonato fundamental para formar los esqueletos calcáreos (incluyendo los cangrejos).
En la fecha actual, apuntan los expertos y organizaciones que el ritmo de desaparición de los corales es alarmante, según la ONU prácticamente la tercera parte han desaparecido y la previsión es que en 2030 lo haga el 60%. La sobreexplotación masiva también es la principal causa de la pérdida de arrecifes con lo que ello representa para la biodiversidad marina. Se calcula que han acabado con el 20% de los 280.000 kilómetros cuadrados de arrecifes, además para el año 2050 seremos 9.000 millones de personas y el control de la pesca será fundamental.
En un informe de la Administración Nacional Atmosférica de EE UU (NOAA) señala que los corales de aguas frías (entre 50 y 3000 metros de profundidad) son muy sensibles a los cambios de su entorno igual que los de aguas menos profundas, viéndose afectados por la explotación de recursos energéticos y la pesca de arrastre de profundidad. La pérdida de los corales también expone a la población a inundaciones provocando erosión en las costas.
El Zoo-Aquarium de Madrid trabaja en un proyecto internacional (SECORE), red de acuarios donde se investiga la reproducción de estos organismos fuera de su medio natural en incubadoras Kreisel, donde han obtenido 1.296 colonias, pero actualmente solo lo hacen en EE UU ya que se necesitan permisos especiales para importarlos a Europa.En muchos países se considera a los corales como un mero accesorio, pero con su desaparición puede que estemos perdiendo para siempre la oportunidad de encontrar algunos fármacos clave como el compuesto AZT, obtenido en los arrecifesy utilizado para tratar el VIH
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